7 de mayo de 2023.- El concierto más explosivo de las noches musicales de Lagos de Moreno lo brindó El Gran Silencio este domingo en el centro de la ciudad.
Desde que se anunció la presencia de este grupo de Monterrey había mucha expectación y lograron atraer a unas 9 mil personas que disfrutaron intensamente el concierto en el que hubo baile, slam, brazos al aire y muchas, de verdad muchas caras de felicidad, empezando por las de los músicos que están en una gira que celebra sus 30 años de trayectoria.
Y es que la tocada de El Gran Silencio no fue un concierto ordinario, era una tormenta de ritmos y canciones en bloques que provocaban no perder el entusiasmo desde que salieron al escenario con el Intro Audiophilia a ritmo de ska de su último disco, siguiendo con Song Bomb, para luego cumbiar con El Retorno de los Chuntaros en la que dejaron claro quien estaba pisando el escenario esa noche, aventando luego la intensa Guacharaca Surf y para bajar un poco el beat compartieron un hit romántico popular, Tonta Canción, con la que hicieron cantar a la mayoría de los presentes.
Ese fue sólo el inicio del concierto porque ya sintiéndose en confianza, con un público totalmente receptivo y cálido invitaron a bailar slam con la intensa y rockera Claustrofobia para luego pasar al reggae de Time y la irreverencia de Diferente.
En el concierto había incluso personas que vinieron de fuera de Lagos de Moreno y aunque se presentaron gotas de lluvia, la gente no se retiró del concierto.
Los de El Gran Silencio agradecieron estaban en Lagos de Moreno, “la ciudad de los Hermanos Dinamita ni más ni menos. Siempre desde morritos fieles a Don Carmelo, que acá entre nos, no se andaba con mamadas”.
Pero había que volver a la cumbia y de qué forma, porque comenzó a sonar la Cumbia Lunera, canción del que quizá sea su mejor disco, Chuntaros Radio Poder, del año 2001.
A pesar del tipo de música, de la intensidad del concierto, el ambiente fue en todo momento 100 por ciento familiar.
La gente no paró y cuando alguno de los vocalistas de El Gran Silencio, Tony o Cano, pedían alzar los brazos, brincar, hacer slam, cantar, recibían una respuesta inmediata porque simplemente se echaron a la bolsa al público de Lagos.
Entre tanta adrenalina las dos horas de concierto pasaron muy rápido y el inicio del cierre fue trepidante: Lo que no fue no será, que cantaba José José, la tocó El Gran Silencio, cóver que forma parte del disco llamado Un Tributo que salió en el año 1998 donde grupos de rock mexicano homenajeron al Principe de la canción.
Luego tocó el turno de homenajear a Celso Piña porque El Gran Silencio cantó Cumbia Poder, que ligó con la cumbia de Símbolo de Amor.
El cierre de este concierto fue una inyección de adrenalina del que nadie de los presentes se pudo escapar: Dormir Soñando, poniendo a todo el público a mover los brazos en alto, y todavía había más.
Llegó el Chuntaro Style y hasta con bailarines del público invitados al escenario, canción ligada a Pachuco, de Maldita Vecindad, recordando a Sax, el saxofonista de esa banda quien murió hace dos años.
Fue una noche inolvidable de los Libres y Lokos en Lagos de Moreno, de esas que te dejan la adrenalina por muchos días gracias a estos cumbiancheros de Monterrey que nos regalaron una noche musical para recordar por muchos años.
Al final del concierto los integrantes de El Gran Silencio mostraron su humildad al tomarse fotos con la gente que les pedía ese recuerdo.
Este evento fue realizado por el Gobierno de Lagos de Moreno, como parte de la programación de Noches Musicales que mes a mes traen a la ciudad eventos de primera calidad para todo tipo de público.