Por: Celia Espinoza
21 de julio de 2017.- El dueño de Asfaltos Guadalajara, Guadalupe Ascencio anunció que para evitar que lo sigan responsabilizando de las afectaciones a las viviendas de Jacales, para el mes de agosto la extracción de material no será con dinamita, sino con el método mecánico.
“Nosotros tenemos necesidad de trabajar de aquí al 31 de julio; les pedimos de favor que haya una comisión para que de 10 de la mañana a 4 de la tarde vaya a ver cuánto utilizamos de pólvora; cómo trabajamos”, expuso a vecinos.
Mientras tanto los vecinos de la colonia Jacales 1 exigen que “alguien” se haga responsable por los daños que presentan sus viviendas.
“Que nos reparen las afectaciones; nos indemnicen, nos reubiquen y nos paguen todo lo que hemos invertido”, externó Laura Vázquez, Presidenta de los colonos.
“Quien salga, pero alguien tiene que de responsable esto, sino es la pedrera, sino es el ejido, sino es el municipio, porque nos permitió (construir) y nos está cobrando un predial y a parte el avalúo de casa. Todos los impuestos si nos los cobran, pero tampoco nos ponen la cara enfrente para decirnos, ‘pasa esto’. No les interesa”, externó Juan José Martínez.
En días pasados los vecinos de Jacales 1 sostuvieron una reunión con los representantes de la empresa Asfaltos Guadalajara y Federico Vogel González del Departamento de Ingeniería en Minas, Metalurgia y Geología de la Universidad de Guanajuato, así como algunos funcionarios municipales para conocer la interpretación de los resultados del estudio que pagó la quebradora.
El motivo fue la presentación del “Estudio de Monitoreo-Determinación de Riesgo Geotécnico”, de la colonia Jacales 1 que tuvo un costo de 185 mil pesos y fue pagado por la empresa dedicada a la extracción del material del cerro de “La Bola”, propiedad del Ejido Lagos.
Para la empresa y los investigadores de la Universidad de Guanajuato, gran parte del problema que padecen los vecinos en sus viviendas es originado por el tipo de suelo en que fueron construidas sus viviendas.
Incluso, señalaron que las instalaciones de la feria y el hotel Casa Grande también presentan “cuarteaduras impresionantes y no fue por culpa de nosotros, fue por donde simentaron”, pero porque también fueron edificados sobre un terreno que presenta “hinchamiento o expansión […] este tipo de suelos crea un problema ya conocido pero de poca importancia en los estudios geotécnicos y es el de la expansiblidad; es decir el suelo tiene la propiedad para que se produzca hinchamiento o retracción del suelo”.
Mientras sean peras o manzanas los vecinos solicitan una reunión a la que asista el Alcalde Juan Alberto Márquez de Anda, “porque así como él vino a pedir el voto para que él quedara, también así debería de venir a dar la cara sea uno o dos los perjudicados, pero aquí somos más de 100 casas. Nos ha dejado plantado. Que nos dé la cara”.
Acuerdo
Por lo pronto se acordó que se implementará el uso de yeso como técnica de medición del impacto tanto de la quebradora como del tipo de suelo en las viviendas para conocer el impacto de la quebradora sobre las viviendas de las casas.
El yeso se colocará en ambos lados de las grietas como técnica para conocer si se abre ese material al momento en que la piedrera realiza las explotaciones en el banco de material; el personal para realizar estas acciones será costeado por la empresa.
“Si se abre, el día que se abra y la hora que se habrá, si coincide con los señores de la piedrera, porque ellos tiene una hora de explosión”, señaló el especialista de la Universidad de Guanajuato.
Francisco Javier Rábago García, representante legal de la empresa, aclaró que el hecho de que hayan pagado el nuevo estudio a la Universidad de Guanajuato no significa que la institución esté obligada a dar resultados favorables para la empresa. “Ellos vienen de una universidad que tiene un prestigio que es nacional, que son los mejores a nivel nacional de la geotécnia y la cuestión de minería”.
Por su parte, Guadalupe Ascencio precisó que los daños que presentan las casas no es por la empresa y responsabilizó al tipo de suelo en el fueron edificadas las viviendas.
“Venimos a tratar el problema que existe en la zona y a proponer soluciones”, fue la postura del propietario de la quebradora, al señalar que ellos están dispuestos a pagar el personal que realice las pruebas con ‘yeso’.
Incluso dieron a conocer que el CONALEP Lagos está construido sobre “tepetate”, “…no arena, sólo tepetate”.
Incluso refirió que desde hace una década aproximadamente se la vivido entre demandas de todo tipo por parte de vecinos de la colonia.
Subrayó frente a todos los reunidos que la empresa no está aferrada a estar donde pueda generar un peligro.
“Nosotros no estamos aferrados a estar en un lugar en donde le harías daños a los personas […] simple y llanamente el problema que tenemos aquí es el suelo, y es un arcilla expansiva, que conocen aquí como chaut”.
Incluso recordó que en 2007 la empresa recibió una demanda por la vía civil, la que nos prosperó.
Los asistentes
La reunión que fue convocada por el Síndico Luis Jaime Ruiz Mujica por petición de los vecinos, con motivo de explicar los resultados del estudio.
Por parte del Ejido Lagos asistió Óscar Ríos; los titulares de Protección Civil Municipal, Gregorio Pedroza; Comunicación Social, Víctor Campos y de Obras Públicas, Javier Ramírez; además de un asistente del área jurídica.
La titular de Desarrollo Urbano, Celia Gómez acudió, pero a los pocos minutos de iniciada la reunión se retiró, dejando muchas preguntas sin responder.
Aunque los colonos tenían conocimiento de que no asistiría el Presidente Municipal, si esperaban la presencia del Síndico y de la Directora de Desarrollo Urbano, Celia Gómez.
Quebradora
Varias era las preguntas que tenían que nadie pudo responderlas. Sólo el titular de Protección Civil, Gregorio Pedroza se comprometió a completar los estudios de habitabilidad de las casas que conforman esta colonia.
“Es una falta de respeto que el gobierno no ha acto de presencia […] Son largas y largas. ¿Están esperando que haya pérdidas humanas?”, manifestó la representante de los colonos, Laura Vázquez.
Lo lamentable ha sido que desde el 2010, el gobierno municipal cuenta con un “Atlas de Riesgos Naturales de Lagos de Moreno”, en el cual ya se tenía contemplado que este tipo de suelos se presentan en buena parte del municipio, como son los “expansivos y colapsables”, y a la fecha no se ha difundido nada.
Recomendaciones
En el estudio de los investigadores de la Universidad de Guanajuato realiza recomendaciones tanto a los vecinos, a la empresa como a las autoridades municipales.
Las sugerencias para la quebradora son: asegurar que las voladuras se realicen dentro de los tiempos programados, para lograr tener un horario fijo. También que en los bancos externos (situados hacia la colonia), se realice el tipo de voladura amortiguada, esto con la finalidad de minimizar las ondas de choque.
Además, a la quebradora se le plantea colocar una sirena de señal (alarma), en la parte superior de la cantera para que los colonos sepan el momento de la explosión. Por lo menos esta señal debe ser escuchada aproximadamente a 1 kilómetro de distancia.
Sobre la edificación de las viviendas, los especialistas que realizaron el estudio, establecen el colocar una capa de material de mejoramiento de mínimo de 0.30 metros para tratar de minimizar los efectos del suelo o también que apliquen el método de estabilización de suelos de las propiedades expansivas de los suelos mediante el agregado de cal o cemento, para modificar las características pláticas del suelo.
Otra forma de evitar estos problemas es la aislación del suelo de variaciones importantes en el contenido de humedad, principalmente la infiltración al terreno de aguas superficiales, colocando buenas formas de drenaje adecuado como confección de cunetas revestidas, áreas pavimentadas y canalización de aguas de lluvia.
“No es que se hagan las tierras grandes […] es el esfuerzo de espiración que hace la
arcilla, […] la resistencia de un concreto es de 200, entonces la arcilla puede romper esa fuerza, porque puede romper más del concreto; no es que crezca más, sino que hace un esfuerzo, porque rompe hasta un hinchamiento de 300 kilopascal, o sea que rompe un concreto”.
Debido a la problemática que estos terrenos ocasionan, “…se recomienda un cambio radical en las estrategias constructivas, ya que posteriormente su reparación es más cotosa que la inversión de mejorar el suelo o el proceso constructivo”.
Para las autoridades se indicaciones son el difundir entre la población los conocimientos sobre suelos expansivos y colapsables conforme al estudio que tienen del 2010 en el Atlas de Riesgos Naturales.
También el generar un reglamento de construcción más adecuado y específico para los colonos que realizan sus propias construcciones y hacerles notar la problemática de los suelos al momento de la aprobación del permiso de construcción.
Casas en abandono
Los vecinos reunidos manifestaron que sus casas presentan grietas y daños desde que la quebradora comenzó con los trabajos de extracción en el cerro de La Bola. La mayoría de los asistentes señalaron que las hendeduras en paredes, techos y pisos no aparecen de inmediato que la empresa hace las explosiones, sino después de ellas.
La mayoría de los afectados han reparado las fisuras que han aparecido en sus casas, pero dicen que han vuelto a surgir y que en tiempo de lluvia, las que se encuentran en el techo se convierten en ‘goteras’.
José Guadalupe Ríos Morales ya de plano tuvo que rentar casa en el centro de la ciudad, debido a que personal de Protección Civil Municipal le dijo que su vivienda era inhabitable. Los daños en ella eran un riesgo.
“Mi casa está en calle Santa Eduviges, y me sacaron porque se está cayendo. Yo tenía 22 años viviendo en ella. Cuando no está la pedrera no estaba cuarteada, pero llegaron ellos (señalando al dueño y el representante legal) yo sentía cuanto tronaba. ¿Cómo cree, yo teniendo mi casa y ahora tengo que rentar”, expuso a El Río.
Sergio Robledo Hernández tiene su casa en calle Robledo; hace un año compró un terreno que le vendió un ejidatario: “nunca me dijeron del riesgo, ni en PLADUE cuando fui a sacar la licencia de construcción. Se puede decir que es nueva, pero está toda dañada”.
