Por: Héctor Guerrero
25 de octubre de 2018.- Estoy cubriendo desde hace varios días la caravana de miles de migrantes que desde Centroamérica ha entrado a México con la intención de llegar a Estados Unidos. Aquí les comparto algunos apuntes de mi viaje:
*Veinte mil pesos mexicanos cuesta una credencial del INE personalizada en Ciudad de Guatemala, la venden los mexicanos en Tecún Umán, la puedes conseguir más barata si la consigues con los guatemaltecos, pero la mejor es de los mexicanos, es la que no falla.
*”Los tacos hondureños”. Las policías municipales de México les quitan el dinero a los migrantes, con ese dinero compran su cena, unos tacos, y los llaman así “tacos hondureños” porque son pagados con el dinero de los migrantes.
*En las calles de San Salvador el ulipristal a la que nosotros llamamos la “pastilla del día siguiente” ellos la conocen como la pastilla “anti México”. Es seguro que a las mujeres las van a violar en México y deben de tráela consigo como una vacuna que van a tener que usar, sólo no saben cuando.
*El puente migratorio estaba cerrado por la Policía Federal Mexicana y fueron un grupo de 20 jóvenes que venían en la caravana los que comenzaron agredir con piedras a la policía y la policía los dispersó con cuatro cartuchos de gas pimienta, no lacrimógeno. Nadie murió en el puente.
*Los migrantes no ingresaron por puntos escondidos de la frontera sin control migratorio, cruzaron por el río Suchiate, enfrente de la policía y de los agentes de Migración.
*Las fotos de los federales heridos que se difundieron en redes sociales son de 2006 en Oaxaca durante el conflicto magisterial. En el puente fronterizo no salieron heridos los policías federales, uno de ellos sufrió un golpe sin consecuencias de gravedad, y no alcance a ver exactamente como le dieron el golpe, el gas me hizo vomitar y solo vi cuando sus compañeros lo sacaron.
*La caravana si está organizada por Ong’s. Es imposible movilizar a tanta gente sin que haya una organización, pero estoy convencido que el principal expulsor y motor de la caravana no es un fondo político, es la pobreza y la violencia en sus diferentes modalidades. Que alguien se aproveche de la desgracia ajena no me sorprende y menos si son políticos, pero es otro asunto.
*Una señora me confundió con migrante y con una muy fea cara me corrió de su restaurante y no me permitió cargar mi celular ni me dio tiempo de comprarle una botella de agua.
*En contraste toda la otra gente que me confunde con migrante me ofrece pan, agua, y comida a lo largo de la ruta.
*Unos de los recuerdos que más me atormenta fue ver a los niños pequeños desmayarse en el puente por el calor y la deshidratación, o ver qué casi se ahogan tratando de cruzar el río.
*Sigo sorprendido de por qué México lleva 3 años ofendido por las de las declaraciones de Trump, y ahora han pedido lo mismo de nuestro gobierno, con los mismos argumentos .
*Hace muchos años leí el libro, La Mara de Rafael Ramírez Heredi. Después leí Los migrantes que no importan de Oscar Martínez
*Hace dos años leí Honduras a ras del suelo de Alberto Arce, hoy estoy muy agradecido de haber leído eso libros, sin ellos mi cobertura sería otra estoy convencido.
*La solidaridad de mis ex colegas de AFP me conmovió y me hizo darme cuenta que mis 12 años ahí no fueron del todo perdidos como yo lo creía.
*Llevo 10 días sin tomar café.