11 de febrero de 2025.-La Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de Jalisco (COBUPEJ) está incorporando nuevas tecnologías y estudios para la búsqueda de personas desaparecidas: analizan qué plantas crecen sobre las fosas clandestinas, qué insectos, escarabajos u otros animales se presentan y cómo se ve la superficie y el cambio de temperatura usando un dron con cámaras especiales, entre otras técnicas.
Lo que hacen los investigadores es crear fosas con cuerpos de cerdos y entonces se monitorean los cambios provocados en el entorno, incorporando diferentes disciplinas del conocimiento.
El proyecto ya cuenta con un libro que habla de ello y que se llama ‘Interpretar la naturaleza para encontrar a quienes nos faltan’, el cual concentra conocimientos del proyecto desarrollado desde 2023 y que tiene como meta elevar la eficiencia técnica en la localización de fosas clandestinas en Jalisco.
Luego de que se pudo integrar este conocimiento en el libro, la segunda fase de aplicación de este proyecto inició el 30 de enero en los dos puntos de experimentación del proyecto:
*Sede Cajititlán, de la Universidad Politécnica de la Zona Metropolitana de Guadalajara (UPZMG).
*Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá) de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
Para la jornada de colecta de nuevos datos acudieron especialistas del Instituto de Geofísica y del Departamento de Geofísica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quienes efectuaron estudios de:
Tomografía de Resistividad Eléctrica (TRE),
Conductividad Electromagnética (FDEM)
Tomografía de Interferometría de Ruido Sísmico Ambiental (TIRSA)
Estas técnicas son inéditas en Jalisco y fueron apoyadas por personal de la Dirección de Análisis y Contexto de la COBUPEJ.
Se tomaron también muestreos de:
Penetrometría con técnica de cuadrícula.
Se sobrevolaron drones con cámara RGB, multiespectral y térmica.
Se colectaron muestras de entomofauna y botánica.
A través de estos métodos, se busca aumentar las capacidades de las instituciones dedicadas a la búsqueda de personas desaparecidas, y de manera particular, mediante técnicas multidisciplinarias se estudian patrones observables en la naturaleza.
De acuerdo con la investigación, para esta segunda etapa se evaluaron parámetros relacionados con la velocidad de ondas sísmicas y el campo electromagnético que interactúa con los componentes del suelo para generar mapas en tercera dimensión de todos los componentes que existen debajo de la superficie.
También se evaluó la intensidad de clorofila de las plantas que crecen en contextos de inhumaciones, temperatura del suelo y la compactación y la forma del terreno.
Según la programación del experimento, para la siguiente jornada acudirán personas investigadoras del Centro de Investigación en Ciencias de Información Geoespacial de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (SECIHTI).
Los hallazgos científicos de la primera etapa se pueden consultar en el texto digital “Interpretar la naturaleza para encontrar a quienes nos faltan”.
El enlace de descarga del documento es aquí:
https://estamosbuscando.jalisco.gob.mx/wp-content/uploads/2024/09/LIBRO%20INTERPRETAR%20LA%20NATURALEZA.pdf .
